Esto es lo que se puede llamar una receta de aprovechamiento. Me
da tanta rabia tirar comida, que me encanta idear platos para aprovechar lo que
sobra. En este caso es el pan del día anterior: si no tengo ninguna idea lo
rallo y ¡ya tengo pan rallado para los filetes empanados!
Ingredientes:
½ barra de pan del día anterior
6 huevos
7 cucharadas de azúcar
La corteza de un limón
1 rama de canela
Caramelo líquido
Ponemos el caramelo líquido en el
molde donde vayamos a hornear nuestro puding (yo lo hago en uno de plum-cake,
podéis comprar el caramelo hecho o hacerlo poniendo unas 3 cucharadas de azúcar
en un cacito y cuando empiece a coger color volcarlo en nuestro molde).
Cortamos en rebanadas de unos 2 cm de grosor el pan y
cubrimos la base del molde caramelizado. Ponemos el litro de leche a hervir con
la cáscara de limón y la canela en rama. Retiramos del fuego y dejamos
entibiar. Colamos la
leche. Batimos los huevos con el azúcar y añadimos poco a
poco la leche tibia. Removemos bien y vertemos la mezcla en el recipiente donde
tenemos el pan.
Horneamos al baño maría durante
40 minutos a 180°. Una vez frío, desmoldamos y veremos que nos queda el puding
con dos texturas, la parte inferior tipo torrija y la superior como un flan.
Si queremos que nos quede todo de
la misma textura en vez de poner el pan en la base, lo que hacemos es que una
vez que la leche esté tibia, añadimos el pan troceado y vertemos sobre la
mezcla de los huevos y azúcar, movemos bien y volcamos en el molde
caramelizado, horneamos al baño maría unos 40 minutos a 180°.
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